«Tengo el mejor trabajo del mundo»

Agatha Ruiz de la Prada, un referente en Personal Branding

Agatha Ruíz de la Prada y Sentmenat, XXII marquesa de Castelldosríus, XXIX baronesa de Santa Pau, Grande de España, diseñadora de modas, empresaria, activista y madre de Cósima y Tristán Ramírez. Mujer, Asertiva, Coherente, Honesta, Accesible y Estratégica, todo con mayúscula. Parece haber tenido desde muy joven una idea muy clara de la importancia de ser ella misma y de diferenciarse. soymimarca_personalbranding_grandesmujeres

La marca personal se asienta en la autenticidad, y en la capacidad de sintonizar y conectar con tu público.

Desde hace más de 30 años Agatha Ruíz de la Prada, una década o dos antes de que se acuñara el concepto marca personal a finales de los 90 , ha trabajado incansablemente para quizás sin proponérselo, ser un magnífico ejemplo de personal branding, y sin duda, un gran ejemplo de comunicación personal. Esta vez sí de forma decisiva.

Como Coco Chanel, o Claire MacCardell ella es la mejor modelo y la mejor imagen de su marca. Tenemos más o menos la misma edad, por lo que he podido seguirla desde una perspectiva horizontal. La he encontrado en los medios y la he buscado como diseñadora. He tenido la oportunidad de saludarla en varias ocasiones, de entrevistarla y hasta de pedirle que diseñase unos pendientes exclusivos para Audi cuando yo era la responsable de la publicidad de esa marca en España.

Siempre ha accedido gustosa a hacer de todo y a hacerlo con una consistencia tan sorprendente como probablemente meditada que la ha llevado a apoderarse con una rotundidad épica de territorios tan comunes y recurrentes como los corazones, las flores o los colores amarillo, turquesa y fucsia. Sin pretender dejar nada al azar, ni intentar dejar estar presente en todo lo que ella hace por lejano, pequeño e insignificante que sea ha conseguido fusionar nombre, marca, estilo y esencia a niveles que sólo las grandes firmas consiguen gastando cifras astronómicas en Publicidad o RRPP. Su notoriedad espontánea y sugerida es indiscutible en el mercado español.

Después de varias décadas de constante esfuerzo y perseverancia por estar en todas partes ahora puede hacer sólo lo que la divierte, pero adivino que es una de esas personas apasionadas por su trabajo a las que todo les atrae o les reta. Es en sí misma un fenómeno de conexión, una «performance», que como Salvador Dalí o Madonna saben que sorprender sigue despertando del letargo a audiencias átonas o plumas aburridas de lo clonado . Forma parte de ese tipo de marcas que han impregnado su ADN de creatividad y aprovechan cualquier ocasión para desplegar su atractivo y atraer. Me gusta porque provoca cuestionando sutilmente, demostrando que todo lo escrito se puede reescribir pero también por ser capaz de pelear durante años por sus títulos nobiliarios y presentarse a la boda de los reyes vestida con los colores de la bandera republicana. Quizás sólo para beneficio de su negocio pero a la par para dejar abierta una ventana al pensamiento libre.

Su actitud no denota un ápice de incongruencia sino más bien todo lo contrario: coherencia. No es Agatha Ruiz de la Prada de las costureras que dan puntada sin dedal. Artista, culta e intensa como los colores relucientes que ha hecho que la definan. Hay pocas mujeres en la piel de toro o en el continente con la capacidad de reflejar la forma y el fondo de una marca personal única y bien construida. Ella vende. Un modelo a seguir. Eso sí encontrando nuestra diferencia y exprimiendo su zumo gota a gota mientras definimos nuestra trayectoria. Algo aparentemente sencillo para lo que además de ser listo hay que ser inteligente y tenaz.

Feliz Verano

Aquí,

Reyes Ferrer, Diferencióloga

Deja un comentario