Como hemos comentado muchas veces, marca personal es lo que dicen de uno cuando no está delante (gracias Jeff Bezos). Otra cuestión es la gestión de marca personal, que es el proceso por el cual podemos conseguir unos objetivos en un plazo de tiempo.
Pero para conocer el estado de nuestra marca personal no existen herramientas milagrosas. Quizás hay algún test por ahí rondando, pero jamás igualará el formato que comento a continuación.
El pasado jueves di una charla sobre personal branding a algunos miembros del Club de Marketing de Girona. Cuando exponía la ventana de Johari como herramienta esencial de autoconocimiento para conocer toda la información sobre cada uno, muchos preguntaron qué se debía hacer para que la parte ciega, esa que nosotros no conocemos sobre nosotros mismos pero los demás sí, dejara de ser oculta y se convierta en información pública.
La respuesta es una: preguntando.
Sí, tan sencillo y tan difícil como eso. Y ahí surgieron los miedos. Muchos padecían el síndrome del miedo a preguntar por varias razones:
- Quizás no quieran conocer la percepción de los demás
- Les da miedo obtener respuestas negativas
- Temen la reciprocidad, entendida como “devolver el favor”
Pero por duras que puedan ser las respuestas, necesitamos hacer las preguntas. No existe un cuestionario universal para eso, cada persona y cada profesión requerirán preguntas distintas. Por ejemplo, si alguien se quiere dedicar al Management se podría plantear de esta manera:
- ¿Crees que sé delegar?
- ¿Piensas que seré bueno trabajando en equipo?
- ¿Y dirigiendo equipos?
- ¿Crees que tengo ambición?
- ¿Crees que estoy preparad@?
- ¿Cómo me definirías en tres palabras?

Puedo asegurar que las respuestas a estas preguntas tendrán mucho más valor que las de un cuestionario online de autorespuestas, ya que estas respuestas están redactadas desde la experiencia del entorno de cada uno: amigos, colegas o ex colegas de trabajo, clientes, colaboradores, familia…
Si surgen cuestiones negativas hemos de valorar si se trata de competencias vitales para nuestro desarrollo profesional o secundarias. No podemos apoyar la gestión de nuestra marca en competencias que no tenemos. Si uno es un gran director comercial pero tiene terror por las cámaras será mejor que no utilice el vídeo para llegar a sus clientes.
Os invito a hacer la prueba, por supuesto adaptando las preguntas a vuestra situación profesional. Las sorpresas suelen ser abundantes y ricas, e invitan a reflexionar sobre si podríamos mejorar nuestro desarrollo profesional.
Además, y para cerrar el post, haciéndolo conoceremos, al fin, cuál es nuestra marca personal. Ya ves, tienes miedo a preguntar, lánzate.
[subscribe2]
Consultor, formador y conferenciante sobre personal branding.
Socio fundador y Personal Brander en Soymimarca.
Convencido de que todo deja marca, ayudo a humanizar empresas y ayudo a profesionales a proyectar su marca para lograr sus objetivos.
Además de Soymimarca, soy socio en Integra Personal Branding México, y Director de Branding en Omnia Branding.
Profesor en ISDI, en el EMBA de IESE. Publicitario colegiado, master en Mkt y estudiante de grado de Humanidades (UOC).
Mi ADN está formado por experiencias en Tiempo/BBDO, J.W.T., Bassat Ogilvy, Saatchi & Saatchi, Altraforma y TVLowCost entre otras.
guillemrecolons.com
Buen post Guillem!
Realmente, yo me planteo, ¿cuál es el miedo real a preguntar? Y sólo obtengo una respuesta, y es que nuestro ego impide que preguntemos pues tememos encontrar respuestas a nuestras preguntas.
No hay más misterios al final, hay que comenzar por apartar nuestros egos reconociéndonos, sólo así llegamos realmente a descubrirnos… Al autoconocimiento, con nuestras carencias y nuestras fortalezas.
Un fuerte abrazo Guillem!
Cierto Alexis! El miedo a preguntar equivale al miedo a crecer. No existe obstáculo igual. Un abrazo y gracias por escribir!