Es mejor pedir perdón que pedir permiso

El pasado domingo se produjo un interesante debate sobre ética y empresa en el rotativo La Vanguardia. Domènec Melé, catedrático de ética empresarial en IESE, apuesta por «una nueva cultura empresarial», y apunta el caso de la empresa americana AES que ante un conflicto entre valores y beneficios apostó por los valores.

En el otro lado del debate, Antonio González Barros, presidente del grupo Intercom, apuesta por la persona como eje central del debate ético en su artículo «Lo primero es la persona«, donde arranca afirmando que la ética exige considerar que lo más importante son las personas.

Os reflejamos este último artículo de González Barros, donde se apuesta claramente por ética a través de la marca personal.

Guillem Recolons / Personal Branding Strategist / soymimarca

La ética no es un añadido, sino un componente esencial de la empresa. Se concreta en principios y valores que han de guiar la actuación en la actividad empresarial.

He aquí algunos ejemplos en cada uno de nuestros valores:

Pensar en los demás: en 1997, atravesando una situación complicada, el equipo de dirección decidió no cobrar su sueldo unos meses para poder pagar las nóminas de los empleados. El líder de un negocio dejó que su técnico se fuese a otro proyecto diferente, que le ilusionaba más, retrasando el lanzamiento de la web y teniendo dificultades en cubrir su puesto. Una directiva propuso tomarse una excedencia para dedicarse más a su familia y a su proyecto personal. Todo el equipo la apoyó y felicitó por su decisión. En cada venta de una empresa incubada en el grupo se ha gratificado a todo el equipo. En un mal momento de tesorería llegó una propuesta de un anunciante radicado en Gibraltar que quería invertir en publicidad un millón de euros anunciando casinos on line. No se aprobó.

Poner pasión y alegría: varios emprendedores abandonan sus trabajos seguros para incorporarse a un negocio incipiente dentro del grupo. Lo hicieron con una pasión que contagiaba a sus equipos, dedicando una parte importante de su salario a la compra de acciones de su empresa.

Pensar en grande con humildad: el director comercial de Infojobs, cuando la empresa creció, gracias en buena parte a su gestión, aceptó de buen grado que se contratase a un profesional más preparado para la mayor dimensión del proyecto, pasando él a un segundo plano.

Decidir con autonomía aplicando el sentido común: la persona que proyectó las obras de unas nuevas oficinas tuvo pleno poder de decisión sin haber tenido experiencia previa en este tema. Se le dio carta blanca, y respondió a la perfección. Se anima a aplicar la máxima «es mejor pedir perdón que pedir permiso«.

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