Yo creo que a estas alturas aún no está todo dicho. Aquí en el generoso blog de Soymimarca, hemos estado ya desde hace años proclamando el sentido conceptual, estratégico y operativo de la marca personal.
Tenemos un posgrado en personal branding en la Universidad Blanquerna de Barcelona, realizamos en junio en la misma ciudad un evento especial, el Personal Branding Lab Day, donde casi cien profesionales de toda España hablamos y debatimos acerca de ella, de sus líneas de acción, de sus vertientes y aplicaciones profesionales.
Y terminamos el año con un evento en la ciudad de Valencia, con gran éxito de asistencia y repercusión, donde hablamos de la marca personal y su relación con la antropología, la ética y los valores del ser humano.
Por todo ello y por mucho más ratificamos el valor del personal branding en seis niveles de desarrollo.
La conciencia ya la tenemos; la necesitamos, y representa un aporte necesario de valor para un entorno competitivo y de incertidumbre.
No se trata de configurar una personalidad, sino un realidad basada en la coherencia. Todos tenemos algo bueno, que nos hace únicos y diferentes. Esa será tu punta de lanza. La meta viene después.
Evidentemente, si no acompañas tu marca con una acción personal coherente, no hay marca, puesto que éste sólo se entiende en sociedad.
Porque debes tomar las riendas de tu vida y tu proyección en ella. Porque no debes esperar que la vida te lleve donde ella quiera. La inercia será negativa, y el tiempo no juega a nuestro favor.
Ímpetu, empuje, seguridad, fe en uno mismo. Porque no hay mayor motivador que saber que estás haciendo lo correcto, y que lo correcto multiplicará las probabilidades de éxito. Hacer bien las cosas, planificarlas y crear una estrategia adecuada.
Impacto, o el efecto de la acción. Comunica tu marca, hazla visible. Sé diferente y notorio, date a conocer y los demás recibirán un mensaje sólido y una percepción personal y profesional clara y nítida. Ya no eres uno más, eres tu propia marca.
Un proyecto de marca personal no hace milagros, pero aumentará tus probabilidades de éxito hacia tus metas.
Imagen: USC Alumni Association
Pablo Adán Micó. Consultor de marketing y estrategia personal. Docente y conferenciante de Habilidades Directivas y Sociales, Marca Personal y Liderazgo para empresas, centros de formación, universidades y escuelas de negocio. Autor de «Cómo ser una Persona Influyente», «El Reto, estrategia personal para tiempos de incertidumbre» y «SOS tengo un jefe tóxico», entre otros.
Estoy de acuerdo en qué no está todo dicho y también en que un alto porcentaje de gente no es consciente de que su marca le puede servir de mucho.
Por otra parte está el tema competitivo, sobre todo en temas laborales. En este sentido hay un bloqueo bastante significativo ya que muchas personas creen que no tienen absolutamente nada que aportar.
Cierto Enrique. Es precisamente la competitividad la que nos obliga a buscar otros caminos. No sólo para destacar, sino también para ordenar metas. Gracias por tu comentario