¿Quién se cree que no estar en Redes Sociales es signo de distinción?
Vuelvo este lunes con un comentario al artículo de Tino Fernández en Expansión Qué tiene de bueno que no estés en Twitter y en Facebook
que publicamos el viernes pasado en Soymimarca ya que participaban en el mismo nuestro colega Guillem Recolons y Andrés Pérez Ortega.
Nos cuenta Andrés Pérez Ortega de la mano de Tino que “ desde el punto de vista profesional, mantenerse fuera de las redes sociales transmite una idea de cierta exclusividad. No eres uno más que ofrece lo mismo que el resto sino que, profesionalmente, tienes algo que aportar que no se encuentra realizando una simple búsqueda en Google” y añade “ hasta hace poco, estr en Internet te daba prestigio, y de un tiempo a esta parte parece que te lo quita… Emilio Botín, Juan Roig o Florentino Pérez, ¿tendrían el mismo prestigio si se dedicasen a subir fotos de sus empleados a Instagram? ¿Ha mejorado Marcos de Quinto su prestigio profesional por estar en Twitter o esto lo ha debilitado? No estar en dospuntocerolandia te mantiene en el Olimpo de los profesionales, porque los dioses no tuitean”.
La aparición de Internet y de las Redes Sociales ha cambiado la manera de relacionarse y de comunicarse entre las personas, cualquiera de nosotros puede hacer llegar su voz a personas, públicos y lugares que antes hubieran sido simplemente imposibles y ha permitido que lo que antes era exclusivo de un grupo selecto de ciudadanos ahora esté al alcance de todos nosotros o dicho de otra manera esté al alcance de cualquiera. Y esto ha creado una nueva manera de ver el mundo y de relacionarse.
Existe el mundo de los átomos, el mundo en el que las personas nos relacionamos de manera presencial, no virtual, e intercambiamos informaciones y estímulos visuales, auditivos, táctiles, olfativos que ponen en movimiento todos nuestros sentidos y existe el mundo de los bits, el virtual, el de internet, en el que intercambiamos también informaciones pero el nivel de la experiencia es más limitado que en el mundo anterior y ambos conforman el mundo real. Nuestra manera de ser, nuestra edad, nuestras capacidades, nuestros conocimientos y la manera que hayamos decidido comunicarnos nos permitirá movernos en equilibrio entre los dos mundos o decantarnos hacia uno en concreto. Tengamos en cuenta de todos modos que el desequilibrio absoluto nos lleva al aislamiento y esto tiene sus consecuencias. Y en el estado actual de las cosas podemos vivir perfectamente sin estar presentes en la red aunque es más complicado intentar vivir fuera del contacto físico con los demás sin poner en peligro nuestra integridad psíquica.
Los dioses que no tuitean y no están presentes en las Redes sociales forman parte del pasado. Los Emilio Botin, Juan Roig o Florentino Pérez de turno siempre han tenido los canales de comunicación a su disposición o los recursos económicos para activarlos. En la historia de la humanidad siempre ha habido personas a nivel local o global que por sus acciones, por su prestigio social o por su capacidad económica que han podido comunicarse y hacer llegar su mensaje cuando lo han creído conveniente. Internet, las redes sociales y las facilidades para crear espacios propios virtuales como son los blog han abierto este campo al resto de ciudadanos, a todos nosotros. Si Botín no está en LinkedIn es porque no le hace ninguna falta pero a alguien como yo si porque es una manera de contactar con mi público, con vosotros.
La propuesta de valor y los servicios que ofrecemos a los demás se generan en el mundo no virtual pero ¿de qué sirve ser muy bueno en algo si nadie se entera? y para que nuestro mensaje llegue más allá de nuestro entorno inmediato las redes sociales nos echan una mano valiosísima.
Mis dioses, las personas que admiro y con las que me relaciono y que constituyen mi comunidad, vosotros, tuitean y están en las redes sociales y el día que dejen de hacerlo me volveré ateo. Y seguiré recomendando a mis clientes que tengan una presencia activa en las redes sociales para tengan más elementos para ser conocidos, reconocidos y memorables.
Nuestra propuesta de valor se genera en el mundo de los átomos y se propaga a través de las Redes Sociales.
Los “dioses” que no están en redes sociales forman parte del pasado.
¿Para que sirve ser el mejor si nadie se entera? Si Botín no esta en LinkedIn es porque no le hace falta.
Asesor de marca personal y socio de Soymimarca / Profesor Asociado en la Facultad de Comunicación Blanquerna (URL) y Director del Posgrado en Personal Branding en la Facultad de Comunicación Blanquerna (URL) / Economista (UAB). / PDD & MBA (IESE Business School & The University of Chicago). / Coach titulado (University of Texas, Dallas). Miembro de AECOP. / Miembro certificado de la International Coach Federation ( Associate Certified Coach). / 25 años CFO,CEO. Co fundador del Grupo Sintax Logistica.