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Reduciendo la marcha
El fenómeno del downshitfing (reducir la marcha, vivir con menos) arrecia de nuevo con la superconectividad creciente de los entornos digitales. Algo así como los ladrones digitales del tiempo. Si ya era importante en sus orígenes el llevar un equilibrio entre lo laboral y lo privado, entre lo material y espiritual, ahora se alzan voces que claman incluso recuperar los viejos terminales móviles sin conexión a Internet para tener un mayor control de la gestión de nuestro tiempo y, sobre todo, de nuestras prioridades.
¿Somos dueños de nuestra vida?
La cuestión es si somos dueños de nuestra vida o si las interrupciones permanentes en forma de alertas, avisos… se adueñan de nuestro tiempo. Muchos hemos caído en el fenómeno de la sobre-saturación de información, que no procede únicamente de las redes sociales clásicas como Twitter, Facebook, Linkedin o Instagram, también de plataformas digitales como Whatsapp, de nuestro correo electrónico y de las “nuevas funcionalidades” que nos avisan siempre que alguien a quien seguimos emite un vídeo en directo (Periscope, Facebook vídeo, Instagram, incluso Whatsapp…).
Posibles rutinas para resolver el problema
La solución a este fenómeno pasa por cuatro rutinas recomendables para reducir la marcha:
- Determinar qué fuentes de información y -por tanto, de interrrupción- son prioritarias para nosotros. Por ejemplo, podemos clasificar entre las siguientes:
- Llamada telefónica de alguien de nuestra lista
- Llamada telefónica que no identificamos, y que puede ser spam, pero también alguien que nos trae buenas noticias
- Medios tradicionales (TV, prensa, radio…)
- Correo postal
- Correo electrónico. En este sentido, plataformas como GMail que distinguen entre correo normal, social o promociones, son de gran ayuda.
- Mensajería instantánea: Desde las app como Whatsapp, Telegram o Line hasta los mensajes directos de Messenger (Facebook), Twitter, Instagram…
- Redes sociales: Menciones directas, etiquetados en fotografías o vídeos…
- Smartphone: Notificaciones procedentes de apps, de redes sociales, correo electrónico, Whatsapp
- Medios de comunicación digitales (webs, blogs, portales…)
- Colocar nuestra agenda por encima de cualquier fuente de información, dejando que ésta se interrumpa únicamente por aquellas que hemos situado como prioritarias. En otras palabras, dejar un tiempo para cada cosa. Si las redes sociales no son importantes para nosotros lo adecuado sería destinarles un tiempo no pre-asignado a otras tareas. Por ejemplo, tiempos muertos (esperas…) o un momento antes de cenar… Nadie se va a preocupar porque tardemos unas horas en contestar.
- Eliminar las notificaciones en el smartphone. Es una solución que muchos psicólogos están recomendando. Significa que cuando quieras ver algo o a alguien, lo harás siguiendo tu voluntad y tus prioridades de tiempo. En Whatsapp y aplicaciones similares, por ejemplo, se pueden “silenciar” grupos (lo más temible) para no estar constantemente mirando el terminal. En las apps de redes sociales sólo hay que eliminar las notificaciones. Así de sencillo.
- Desconectar bluetooth y wifi cuando necesitemos concentrarnos en nuestro trabajo o, simplemente, en leer un libro.
¿Más radical?
Quizás no sea necesario recurrir a extremos como recuperar un terminal sin acceso a Internet si seguimos pautas de sentido común y si somos conscientes de que los medios digitales son grandes fuentes de información y conectividad, pero también ladrones digitales del tiempo. El downshitfing digital se va a ir introduciendo en nuestra cultura. Por nuestra salud.
Foto: Unsplash Lionello DelPiccolo
Consultor, formador y conferenciante sobre personal branding.
Socio fundador y Personal Brander en Soymimarca.
Convencido de que todo deja marca, ayudo a humanizar empresas y ayudo a profesionales a proyectar su marca para lograr sus objetivos.
Además de Soymimarca, soy socio en Integra Personal Branding México, y Director de Branding en Omnia Branding.
Profesor en ISDI, en el EMBA de IESE. Publicitario colegiado, master en Mkt y estudiante de grado de Humanidades (UOC).
Mi ADN está formado por experiencias en Tiempo/BBDO, J.W.T., Bassat Ogilvy, Saatchi & Saatchi, Altraforma y TVLowCost entre otras.
guillemrecolons.com